23 junio 2006

Educación Ambiental

Por: Pablo Aranda, ayudante del Centro de Derecho Ambiental

Hablamos del medioambiente, del cuidado de la naturaleza, de ecosistemas y ecología, pero ¿qué sabemos realmente al respecto?
Es claro que el tema hoy está más vigente que hace dos décadas. Manejamos términos que antes no conocíamos, incluso existen más organizaciones civiles que se reúnen en torno al tema de la preservación del medioambiente. Pero ¿qué sabemos realmente al respecto?
Estudiamos durante 12 años en colegios, escuelas y liceos. Durante 12 años nos hablaron de las guerras, revoluciones, sujetos, predicados y ecuaciones.
También aprendimos un poco de las especies animales y vegetales, pero no me atrevería a decir que tenemos un conocimiento acabado sobre ellas.
Curioso, si pensamos que somos parte integral de la naturaleza , que ésta nos permite alimentarnos, vestirnos y despertar todos los días.
Supongo que a nadie se le ocurriría pensar que una persona que fue al colegio olvidó como dividir o conjugar un verbo. Sin embargo es fácil imaginar que esa misma persona no recuerde cómo ocurre un proceso de biodegradación, o que condiciones debe tener un suelo fértil.
Sinceramente, no sólo creo que aceptemos que esa persona no lo recuerde sino que es altamente posible que nunca lo haya sabido.
Ese es el punto, no fuimos educados para vivir en el mundo. El mundo real, el mundo palpable, el mundo compuesto por seres vivos. Nunca un profesor nos enseñó teorías sobre el cuidado del medio ambiente.
Por ejemplo, todos estudiamos la primera y segunda revolución industrial. Pero ¿A alguien le explicaron el impacto en el ambiente que estas conllevaron? Con suerte, a alguien le hablaron del hacinamiento de los trabajadores y los sueldos ínfimos, y eso sólo si el profesor tenía una gran conciencia social.
Hoy no sabemos nada del ambiente, no penalizamos a quienes lo alteran, no culpamos a quienes no lo respetan, no proponemos nuevas alternativas menos dañinas, pero no porque no queramos, sino , simplemente, porque no sabemos.
Si la educación sufrirá reformas, hay que aprovechar la oportunidad. La jornada completa es una instancia perfecta. Hay que crear, hay que trabajar, hay que pensar cómo incorporar el cuidado del ambiente en el currículo obligatorio de cada colegio. Hay que trabajar ahora, la idea es que los niños de hoy día, mañana no se pregunten “pero ¿qué sabemos al respecto?”. La idea es que lo sepan, lo practiquen y lo proyecten

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Prof. Pablo Aranda,
Dice que no culpamos a quienes no respetan el medio ambiente. ¿Se ha evaluado la utilidad de la acción por daño ambiental establecida por la ley de bases del medio ambiente, que entiendo que es relativamente nueva?
No cree que se debieran difundir más las escasas herramientas que el derecho entrega para proteger el ambiente?
Otra pregunta, ¿es partidario de que se cree la figura del delito ambiental en el Código Penal?
Atte,
Patricio E. estudiante de Derecho, Concepción

Anónimo dijo...

Fernando Guerrero
COLOMBIA
No necesitamos delitos ambientales tipificados en un código penal, por lo menos en Colombia tenemos otros mecanismos más efectivos que protegen el medio ambiente. Nosotros entramos es a investigar poruqe delinquimos, porque contaminamos, porque estamos destruyendo el ecosistema.